Es solo mi mente la que se revuelca
En los más perversos pensamientos
Hacen que del corazón broten lágrimas
La mente es tan traicionera como el corazón
Te piensa tanto como el corazón te ama
Pero parece no perdonar heridas del pasado
Seré yo o serás tú el que tiene la cura para ellas
No hay que dejarle trabajar
En tan oscuros y macabros recuerdos
Que permiten que el alma envejezca más rápido
Y que cada vez mi cuerpo camine más lento
Por el horizonte bestial de los buenos sentimientos
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